
Ruthie Ann
Ruthie Ann pinta retratos. Esta es solo una pequeña selección de los que más me han gustado, podéis ver más en su portafolio.
Ruthie Ann pinta retratos. Esta es solo una pequeña selección de los que más me han gustado, podéis ver más en su portafolio.
Mientras visualizo el portafolio de Jarek Puczel (Polonia, 1965) y elijo algunas de sus pinturas para este post me doy cuenta de cómo, a pesar de los millones de cosas que me gustan, estilos, ideas, estéticas… al final, siempre voy a parar al mismo sitio. Como dicen en inglés: “food for thought”.
Frrresh es una revista online croata que publica el trabajo de artistas visuales de todo el mundo, y lo hace mensualmente. He seleccionado algunos artistas que me han gustado. Van por el cuarto número.
Alison Scarpulla, fotografía
Mar Hernández, Malota, ilustración
Muxxi, ilustración
Lily Scratchy, ilustración y cerámica
He conocido el trabajo de Tobias Tovera a través de Design Sponge y me ha gustado mucho. Pigmentos difuminados se llama esta serie. Seguid el enlace para ver sus sugerentes Permutaciones en hierro, a la que corresponde la última imagen de este post.
Esta ya es la tercera iniciativa fascinante que encuentro esta semana, al menos a mi el mundo de Sabine Timm me ha sorprendido de una manera muy agradable. Últimamente me apetece muchísimo jugar, sea de la manera que sea, hacer cosas por el sencillo placer de hacerlas, aunque sean aparentemente absurdas, divertirme. Las escenas que crea y fotografía Sabine Timm me recuerdan que entre otras cosas la vida es juego y que al final casi todo va a parar ahí, a instantes de puro y simple disfrute, sean del tipo que sean. Seguid el enlace al rincón de juegos de Sabine, no solo es divertido visualmente también los títulos con que lo acompaña, como esta hoja-ojo con pestañas que veis aquí abajo, el skyline de pan, la tostada azulejo o peinar la información. Me encantan estas cosas, son simplemente geniales.
Esta entrada se publicó por primera vez el 23 de abril de 2009 y ha sido revisada.
Cuando pensamos en los clásicos de la literatura infantil, invariablemente nos acordamos de Alicia en el País de las Maravillas, de Lewis Carroll.
La Alicia de Carroll está repartida entre dos libros: Alicia en el País de las Maravillas y Alicia a través del espejo. El primero fue escrito basándose en el relato que el propio Carroll (que en realidad se llamaba Charles Dodgson, era sacerdote anglicano y profesor de matemáticas en Oxford) hizo a las tres hermanas Liddell durante un paseo en barca. Una de las hermanas se llamaba Alice y a ella le regaló Carroll el manuscrito del relato, ilustrado por él mismo.
Esta es Alice Liddell, fotografiada por Lewis Carroll:
y esta es la última página del manuscrito, con la foto de Alice:
Posteriormente el libro fue publicado con ilustraciones de John Tenniel, que dio vida a una Alicia rubia:
En respuesta al éxito de Alicia en el País de las Maravillas, Carroll escribió la segunda parte, en la que Alicia atraviesa el espejo.
Los dos libros son un compendio de geniales bromas del reverendo Charles Dodgson, un montón de retruécanos que ha sido objeto de análisis literarios y psicológicos de todo tipo, hijos de la época victoriana en que fueron concebidos, profundamente ligados a la lengua inglesa: un verdadero reto para cualquier traductor y dificil de entender para cualquier niño que no sea inglés, no viva en el siglo XIX o, incluso, no esté a bordo de la barca con las niñas Liddell aquella lejana tarde de verano de 1862. Es por eso por lo que, pese a ser un clásico infantil, su verdadera inmortalidad está en el interés que despierta su lectura en los adultos.
Y para adultos es la obra que recomiendo: La Alicia anotada, una edición comentada por Martin Gardner, conocido matemático y ensayista americano, que incluye ambos cuentos.
Consta del texto íntegro acompañado de comentarios que enriquecen sumamente la lectura y contextualizan el particular sentido del humor de Carroll. Es la edición más importante realizada de las dos Alicias en el mundo anglosajón. La traducción, de Francisco Torres Oliver, es excelente y la cuidada edición incluye las ilustraciones originales de Tenniel. ¡No puede faltar en ninguna biblioteca que se precie!
Para que disfruteis, aquí os dejo algunas otras Alicias, a parte de las de Tenniel.
Una Alicia morena, calcada a Alice Liddell, de Inga-Karin Eriksson:
Otra Alicia morena, de Lola Anglada:
Y otra, de Bessie Pease Gutmann:
La Alicia rubia de Mabel Lucie Attwell:
Mi Alicia preferida, la de Arthur Rackham:
Algunas modernas me gustan también como la de Helen Oxenbury o la de Rébecca Dautremer, una rubia y otra morena:
Pero me gustan mucho más las venerables Alicias centenarias que os he mostrado antes. ¿Y cual es vuestra preferida?