
Terrarios
Visto en el Blog de Gennine.
Visto en Cookie Magazine.
Visto en el Blog de Gennine.
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Gràcies amic! Pura vida!
Para quien tenga la suerte de tener un jardín, una de las experiencias más interesantes – para los niños y los no tan niños – es la observación directa de la vida, animal y vegetal. Hacer una casita para los pájaros – y tener la suerte de que se instalen en ella – es algo que a cualquier niño le va a entusiasmar. La casita que veis en la foto está hecha por la familia de Anar aprenent, en el blog encontrareis los planos y la descripción de todo el proceso. (Aunque está en catalán, las imágenes son bastante descriptivas).
Si queréis más fuentes de inspiración para diseñar vuestra propia casa para pájaros, os proponemos estos sitios:
Bowen Bird Houses
Fowl Places
Jardins Animés
Hace unos días os hablábamos de cómo a muchos niños les encanta recoger y coleccionar tesoros del bosque. La recogida puede ser totalmente espontanea, o ir debidamente equipados, como hace Riley (foto vista en el blog LMNOP, realizada por Ian MacPherson).
Hoy os queremos enseñar cómo podemos exponer esas colecciones de una manera realmente bonita con estas imágenes de Good + Happy Day (el blog de Patricia Fuentes, que os recomendamos visitar: está lleno de buenas ideas y bonitas imágenes).
Nos encanta que los niños puedan participar en el día a día de la casa y que sus contribuciones no sean acogidas solamente por ser de nuestros queridos niños sino también por el valor que tienen en si mismas.
Podéis ver más colecciones de objetos naturales en In Heywoods Meadow.
En los años 80 la psicóloga infantil Elinor Goldschmeid acuñó el término “juego heurístico” para referirse a la actividad que desarrollan los niños pequeños cuando exploran las propiedades de los objetos cotidianos. Muchas escuelas infantiles han adoptado esta idea y organizan dos tipos de actividades, según la edad de los niños. A partir de una cesta de tesoros, los bebés se preguntan qué son esos objetos, mientras que los niños algo mayores quieren saber qué se puede hacer con ellos. Cuando me enteré de todo esto me sorprendió porque mis hijos lo habían puesto en práctica por su cuenta sin necesidad de constructos teóricos.
A una edad en que el juego heurístico ya ha quedado muy lejos, mi hijo mayor sigue recogiendo todo tipo de objetos y coleccionándolos en su cesta de los tesoros, explorando sus características e inventado nuevas utilidades para ellos. Elabora a menudo cestas temáticas, su preferida es la de objetos encontrados en el bosque.
Se que muchos niños de esta edad tienen la misma afición a recoger todo tipo de cosas interesantes, como piedras o palitos. Y algunos tienen la suerte de que esos objetos sean aceptados en sus casas como preciosos objetos decorativos: no hace mucho vi una estantería en un pasillo decorada íntegramente con ramitas, piñas y piedras recogidas por los niños de la casa. Sin duda es el pasillo más bonito que he visto nunca.
Esta estantería vista en Maya*Made tiene algo de ese espíritu.